Cualquier momento es bueno para mejorar, lo difícil es dar ese primer paso. El lunes empiezo la dieta, mañana haré ejercicio, quisiera aprender un idioma nuevo o tomar un curso de postgrado pero no tengo tiempo. Todos hemos dado estas excusas en algún
momento de nuestra vida. Yo lo he hecho y ahora me arrepiento. Si realmente queremos mejorar debemos empezar hoy, no mañana, hoy. No tiene que ser algo que cambie trascendentalmente nuestras vidas, puede ser algo muy sencillo. Al llegar a casa luego del trabajo en lugar de ver Netflix o comentar cada post en redes sociales podríamos dedicarle 30 minutos a una lectura productiva o estudiar algo online (hay miles de cursos gratis en internet desde idiomas hasta tutoriales para convertirte en programador)
Lo primero que debemos hacer es identificar que nos motiva y en que queremos mejorar. Si buscamos un ascenso en el trabajo, debemos capacitarnos para alcanzar ese puesto soñado. Aumentar nuestra productividad en la empresa, tomar algún curso de liderazgo, crear lazos estratégicos con compañeros de otras áreas pero sobre todo destacar; pasar de ser buenos en lo que hacemos a ser the best
Si nos gusta viajar, tendríamos que ahorrar. Dejar de gastar en comer fuera, en salidas cada fin de semana, hacer un presupuesto y no realizar compras impulsivas. Saber identificar si lo que queremos comprar es algo que necesitamos o algo que queremos. Si es algo que queremos, lo siguiente es compararlo con aquel viaje que tenemos planificado y mentalmente poner en la balanza que vale más la pena. Cada vestido o celular nuevo nos aleja de esa travesía planeada.
Hace unos años me obsesioné con bajar de peso así que puse en marcha un plan agresivo con rutina de ejercicios diarios y dieta estricta. Obviamente fue un proyecto encaminado al fracaso que apenas duró 10 días. Vale más arrancar caminando y no corriendo. Es mejor 20 minutos de ejercicios 2 veces por semana e incrementar el nivel y la frecuencia según progresamos que una rutina inflexible y agotadora. En cuanto a la dieta, podrías empezar hoy mismo. En la cena no incluyas postre y toma agua en lugar de vino. Cambios simples que nos ayudarán en nuestro desarrollo personal y profesional. Un paso a la vez